La dieta de leche y requesón o dieta láctea, es una dieta que permite bajar varios kilos de forma rápida, sin dejar de estar bien alimentado. Se puede perder hasta 1 kilo diario, independientemente de que se tome leche desnatada o entera.
Esta dieta es ideal para quienes disfrutan beber un buen vaso de leche siempre.
Se sabe que la leche es un alimento rico en nutrientes, posee un alto contenido de calcio y aporta al organismo vitaminas como la Riboflavina, la vitamina A, además de otros minerales y aminoácidos.
Aunque existe muy difundida la creencia de que los lácteos engordan, estudios recientes sugieren lo contrario, pues se ha visto que existe una relación entre el consumo de lácteos y la pérdida de peso. Así, quienes incluyen suficiente calcio en sus dietas, pesan menos que quienes no lo hacen.
La dieta de la leche y requesón tiene varios beneficios: ayuda a corregir el problema del estreñimiento; por los minerales que contiene, evita la hipertensión y disminuye el riesgo de cáncer de colon en quienes consumen tres vasos de leche al día.
La dieta de leche y requesón no está indicada en personas con problemas de riñón, ni para los que sufren intolerancia a la lactosa. Una de sus desventajas es que puede resultar monótona.
El secreto de la dieta de la leche y requesón está en beber de un litro y medio a tres litros de leche diarios, lo que equivale a unas 2.000 calorías. Este aporte no adelgaza en condiciones normales, pero lo especial de la leche,
radica en el hecho de que las calorías se concentran en la grasa, y el cuerpo, al no recibir un alimento sólido no las digiere, sino que las quema y así se logra reducir de peso poco a poco.Esta dieta no debe extenderse por más de siete días, ya que podría ser peligroso para la salud. Al concluirla se recomienda ingerir alimentos bajos en calorías.
Los primeros dos días de la dieta de leche y requesón es preciso que solo se consuma leche, luego se puede agregar otros alimentos. En el tercer día se puede empezar a incluir requesón, fruta, una rodaja de pan o una galleta pequeña.
En el quinto día, se puede incluir otros alimentos como carnes, pescados, y sobre todo, frutas y verduras. Al concluir la semana del régimen, deberá regresar a una alimentación normal, evitando el consumo de grasas para no volver a subir de peso.
La dieta de la leche y requesón se hace de la siguiente manera:
LUNES
De un litro y medio a tres litros de leche repartidos a lo largo del día. La leche debe ser entera o en caso contrario, enriquecida con vitaminas y minerales. Puede añadirle café o té con moderación y endulzar con sacarina.
MARTES
Igual que el lunes, beber de uno a tres litros de leche durante el día. Es frecuente que en este día afloren algunos efectos secundarios asociados a la dieta, como el mal aliento. Esto desaparecerá al tercer día del régimen. Para aliviarlo, puede comer zanahoria cruda, pechuga de pollo hervida o bien un poco de pan.
MIÉRCOLES
Este día no se ingiere leche, solo queso o cuajada. Se puede elegir entre una de las siguientes opciones: 1 kilo de requesón a lo largo del día; 5 cuajadas; o ½ kilo de requesón o 3 cuajadas.
El requesón y la cuajada sustituyen a la leche, y además de tener igual cantidad de nutrientes, afectan menos la flora intestinal, ayudando a recuperarla luego de los dos primeros días de ayuno.
Aunque la cuajada y el queso son alimentos base en esta jornada, se puede acompañar de manzana y piña natural. También está permitido comer hasta 100 gramos de pan repartidos en tres raciones de poco más de 30 gramos cada una.
JUEVES
Coma igual que el miércoles. Además puede beber zumos de frutas ácidas (naranja-limón) así como caldo de verduras, siempre que estos se cuelen bien y solo se beba el líquido de la cocción.
VIERNES
• Desayuno: Un zumo de naranja, un café o té con leche (ahora desnatada) y una tostada de pan integral.
• A media mañana: Una manzana o una pera
• Comida: Ensalada mixta con un huevo cocido y una latita de atún bien escurrida (esta ayudará a reponer el déficit de hierro sufrido durante los cuatro días anteriores).
• Merienda: Una naranja o tres mandarinas
• Cena: Un caldo de verduras, un filete de pollo a la plancha y un yogurt natural desnatado
SÁBADO
• Desayuno: Un zumo de naranja, café o té con leche desnatada y dos galletas integrales con margarina 100% vegetal.
• A media mañana: Una manzana o 150 gramos de fresas.
• Comida: Espinacas o acelgas cocidas con una gotita de aceite, filete de lenguado a la plancha y guarnición de ensalada verde (lechuga- escarola). De postre, una pieza de fruta (cualquiera menos plátano).
• Merienda: Macedonia de frutas de temporada con zumo de naranja recién exprimido.
• Cena: Puré de zanahoria, un filete de ternera (150 gramos) a la plancha, y de postre, un yogurt natural desnatado.
DOMINGO
• Desayuno: Zumo de naranja recién exprimido, café o té con leche desnatada, endulzada con sacarina, y una tostada de pan de harina integral.
• A media mañana: Una manzana o pera.
• Comida: Ensalada variada y un plato pequeño de arroz o pasta con una guarnición de verduras y hortalizas. Una fruta.
• Merienda: Café o té con leche desnatada con sacarina y una o dos galletas integrales.
• Cena: Menestra de verduras, una rebanada de pan de centeno con 50 gramos de requesón y de postre, uno o dos kiwis.
A partir del octavo día puede comer lo que desee, pero con moderación.
0 comentarios:
Publicar un comentario